Aprender a nadar antes de los 6 años

Aprender a nadar antes de los 6 años: por qué es clave
En Escuela del Agua creemos firmemente que aprender a nadar antes de los 6 años es una de las decisiones más acertadas que pueden tomar las familias. A estas edades, el cuerpo y la mente están en pleno desarrollo, y el agua se convierte en un entorno ideal para potenciar capacidades físicas, cognitivas y emocionales. Pero, además, comenzar a nadar de forma temprana tiene un impacto directo en la seguridad infantil.
Numerosos estudios avalan estos beneficios. Por ejemplo, una investigación de la Universidad Griffith (Australia) demuestra que los niños que aprenden a nadar desde pequeños desarrollan habilidades motoras finas, visuales-motoras y del lenguaje con más agilidad que la media (fuente). Además, la Australian Swim Schools Association remarca que iniciar la natación antes de los 5 años tiene efectos positivos a nivel físico, emocional y social.
En nuestra experiencia, los primeros años son clave para establecer una relación sana y positiva con el agua. Por eso, nuestra metodología adaptativa y lúdica se basa en el respeto al ritmo de cada niño. Jugamos, exploramos, acompañamos, y creamos un vínculo de confianza que fortalece su autonomía, autoestima y capacidad para desenvolverse en el medio acuático.
Este enfoque no solo prepara para nadar bien, sino que reduce significativamente el riesgo de ahogamientos. Según la Asociación Española de Pediatría, los ahogamientos son una de las principales causas de muerte accidental en la infancia, y más del 80% de los casos ocurren por falta de habilidades básicas en el agua. No se trata solo de aprender una técnica, sino de adquirir seguridad.
En Escuela del Agua, cada clase es particular y personalizada, sin agobios ni comparaciones. Con bebés y niños, comenzamos con nuestra matronatación desde los 40 días de vida, y evolucionamos hacia el dominio del agua en edades preescolares. El resultado es una generación de niños seguros, tranquilos, fuertes y felices dentro del agua.
Además del componente físico, nuestras clases fomentan el desarrollo emocional, la relación con la familia (papá o mamá acompañan en las primeras etapas) y el aprendizaje a través del juego. En un entorno cálido y profesional, niños crecen seguros, motivados y preparados para afrontar el medio acuático con naturalidad.
¿Y en verano? ¡El momento perfecto!
Si quieres que tu hijo tenga su primer contacto con el agua o si tu hijo aún no sabe nadar o bien quieres que perfeccione el nado, el verano es el momento ideal para comenzar. En nuestros Cursos Intensivos de Verano, el aprendizaje se acelera de forma eficaz, divertida y segura gracias a clases particulares diarias, adaptadas por edades y nivel.
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📍 Escuela del Agua – C/ Marinero Sebastián Ortiz s/n, Gelves (Sevilla)
Porque aprender a nadar antes de los 6 años no solo es recomendable: es fundamental.